A pesar de que estamos en el año 2016, desgraciadamente aún existen personas que ven como algo desagradable o como una falta de educación que una madre amamante a su bebé en público.
A pesar de que estamos en el año 2016, desgraciadamente aún existen personas que ven como algo desagradable o como una falta de educación que una madre amamante a su bebé en público.
E incluso si eres una de estas personas que se sienten incómodas al ver a una madre dando de comer a su hijo, existen maneras más civilizadas para expresar tu malestar que la que utilizó el cliente de este restaurante en Connecticut, Estados Unidos.
Jessi Maher se encontraba en este establecimiento con su bebé cuando este empezó a pedir alimento. La joven no se lo pensó dos veces y empezó a darle el pecho allí mismo.
Lo que no esperaba era la reacción de otro cliente del local, que empezó a insultarla y gritando le pedía a los camareros la devolución de su dinero.
La joven escribió este post en su cuenta de Facebook.
“‘¿No puedes hacer esto en otra parte? Esto es asqueroso, tú eres asquerosa’, me dijo.
Yo le respondí que estaba alimentando a mi bebé y que tenía el derecho de hacerlo ahí.
Al oír mis palabras, comenzó a acercarse cada vez más y me gritó: ‘Eres un asco, eres un asco, eres un asco, eres una perra’.
En ese momento ya todos habían salido a defenderme, tanto los clientes como los empleados de Target. Fue ahí cuando comencé a grabar.
La mujer efectivamente no estaba sola, y los demás clientes y los empleados del local se pusieron de su parte: “Si no le gusta, entonces mire para otro lado. Usted es quien está faltando el respeto. Yo la estoy protegiendo a ella“.
Jessi ha querido agradecer a todos los que le apoyaron en este difícil momento:
“Quiero agradecerte a ti Sarah Pasquariello-Pera, John Smith y el personal de Target que vino en mi defensa ayer. Todos fuisteis fabulosos al venir en mi ayuda mientras me sentaba indefensa y alimentaba a mi hija recién nacida.”
Aquí podéis ver el vídeo:
¿Qué os parece a vosotros? Contádnoslo en los comentarios.
Os dejamos con una historia de lo más extraña… y es que esta mujer ha dejado su trabajo para poder dedicarse a dar el pecho a un hombre adulto. ¡Flipante!