La ilustradora Tuesday Bassen, localizada en Los Ángeles, Estados Unidos, ha denunciado en sus redes sociales que la multinacional de Amancio Ortega ha utilizado algunos de sus diseños sin su autorización, y por supuesto sin pasar por caja. La artista está muy segura de lo que dice, ya que a lo largo de más de un año conocidos, amigos y seguidores en las redes sociales le han ido enviando las “coincidencias” que iban encontrando… hasta que se terminó su paciencia.
Sus tuits denunciando lo ocurrido se han viralizado en las últimas horas, y Zara tiene en frente otra denuncia por plagio, que por cierto no es la primera.
“¿Sabéis qué? A veces es una mierda ser un artista porque empresas como @zara constantemente te roban y lo niegan.”
Según la artista, Zara le ha contestado que los diseños son demasiado comunes como para poder reivindicar sus derechos. Pero si nos fijamos bien, no parecen tan comunes, ni que pueda haber habido coincidencia.
“Zara dice que mis diseños son muy simples y un diseño común, pero claramente ellos AMAN MI TRABAJO… pues PAGADME.”
Pero el escarnio público se produce especialmente después de que los abogados de la artista hayan contactado a los de Zara. Tuesday denuncia la soberbia y prepotencia con la que ha contestado Zara, publicando un extracto de la carta enviada a sus abogados.
“Los abogados de Zara dicen literalmente que no tengo ninguna base porque yo soy una artista ‘indi’ y ellos una gran empresa.”
Este es el extracto de la carta:
Rechazamos sus afirmaciones por razones similares a las que ya se han indicado más arriba: la falta de carácter distintivo de los diseños de su cliente hace que sea muy difícil ver cómo una parte significativa de la población mundial sería capaz de asociar esos diseños con los de Tuesday Bassen. Esta es nuestra firme opinión, siendo plenamente consciente de todas las notificaciones que ha traído a nuestra atención. En este sentido, debe tenerse presente que la cantidad de avisos son solo un puñado de quejas; si se tiene en cuenta que millones de usuarios de todo el mundo visitan nuestros sitios web (Zara : 98,000.000 visitas mensuales de promedio el año pasado, Bershka: 15.000.000 visitas mensuales de promedio), las cifras ponen claramente esas pocas notificaciones en perspectiva.
“Es un asco y muy desalentador tener que usar básicamente todo mi dinero sólo para defender lo que es legalmente mío. Algunos de ustedes están preguntando cómo pueden ayudar. Vuelvan a publicar mis fotos y etiquetas, en Twitter, en Instagram, en Facebook. No quiero pedir dinero a nadie para que tengan que soportar la carga financiera que viene con las demandas.”
¿Qué os parece a vosotros? Contádnoslo en los comentarios.
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