violadores de los Sanfermines” se han ido cumpliendo. La policía había teorizado durante algún tiempo sobre si los cinco inculpados podrían haber actuado de manera similar en el pasado… y así se confirmó hace unas semana.
Las peores sospechas sobre la actuación en grupo y perfectamente organizada de los conocidos como “El juez que investiga los hechos del pasado 7 de julio encontró claros indicios de que cuatro de los cinco acusados habían abusado anteriormente, durante el pasado mes mayo, de otra joven de 21 años en una localidad de la provincia de Córdoba. De hecho, los investigados habrían grabado estos abusos con un smartphone y habrían compartido al menos uno de los dos vídeos a través de un chat de WhastApp. Pues bien, las imágenes han salido a la luz y son tan repugnantes como os podríais imaginar.
El magistrado indicó en su momento que “existen serios indicios de que podrían haberse utilizado sustancias específicamente destinadas para provocar la inconsciencia de la víctima“, como por ejemplo la burundanga, una droga que en un principio habían planeado llevar también a Pamplona.
Según el relato de este otro caso, anterior al de sanfermines, la víctima cayó “en un estado de profunda inconsciencia“. Mientras “todos ellos le tocaban los pechos“, “riéndose entre ellos de la víctima“, la llevaron luego hasta la localidad de Pozoblanco, donde se despertó “completamente desnuda en el asiento de atrás” y con el mono y las medias rotas.
La supuesta utilización de una sustancia, ha razonado el magistrado, explicaría aquella polémica referencia posterior en el chat Veranito “a la voluntad de llevar para el viaje a Pamplona burundanga“.
El vídeo, que el grupo de sevillanos quiere invalidar, demuestra los tocamientos a esta joven semiinconsciente. En el asiento de atrás del coche se puede ver a la chica con “Escu” y el militar del grupo, “Arfon”. Cuando éste último se da cuenta de que le están grabando, rodea a la joven con su brazo derecho mientras con el izquierdo, empieza a manosearle el pecho por dentro del vestido. Después, besa a la víctima y mira a la cámara… y esto es solo el comienzo de las imágenes a las que ha tenido acceso El Español.
Por si todo esto no fuera suficientemente trágico y vergonzoso, se ha sabido que la joven de 21 años acudió a un Policía Municipal tras los hechos… pero no la creyó. Así aparece recogido en un informe realizado posteriormente por la Policía Foral de Navarra, que ha servido al juez de Pamplona para imputar nuevamente a los denunciados.
“La presunta víctima manifiesta verbalmente que relató lo sucedido a varios amigos e incluso a un agente municipal, no creyéndole, motivo por el cual no llegó a presentar denuncia en aquellas fechas“, es lo que asegura este informe.
Por cierto, que también se han filtrado imágenes de la presunta violación de “la manada” en los Sanfermines…