Las aguas bajan revueltas en Telecinco desde hace varios meses, después de que realities tan importantes para la cadena como GH VIP o Supervivientes no hayan respondido como esperaban, o que la edición de Gran Hermano con Jorge Javier al frente ha sido la edición menos vista de la historia del reality. Como bien saben los aficionados al fútbol, a veces toca fin de ciclo.
Y es que la caída de audiencia de los programas relacionados con su presentador estrella, Jorge Javier, es notoria: puede que, como apuntan muchos críticos con el canal de Mediaset, el modelo televisivo que gira alrededor de la prensa del corazón, y que tan buenos resultados les ha traído con programas como Sálvame y Deluxe, se esté agotando. Mientras, Jesús Vázquez sonaba como posible sustituto pero la cadena todavía no se decide a estrenar su nuevo formato, Me lo dices o me lo cantas, por miedo a que no sea capaz de competir con Tu cara no me suena todavía.
Pues bien, la noticia bomba de esta semana en Mediaset ha sido el posible regreso de Pepe Navarro a la pequeña pantalla; Navarro sigue dando mucho de qué hablar tras su polémica con Ivonne Reyes y su paso por el Mi casa es la tuya de Bertín Osborne. Él sigue empeñado en recordarle a todo el mundo que sigue en activo y con ganas de regresar a la televisión.
Muchas fuentes se han hecho eco de una posible oferta por parte de los responsables de la cadena, que habrían puesto sobre la mesa del presentador una propuesta para que vuelva al formato late night que le hizo famoso.
Se enfrenta a la oposición de muchas vacas sagradas de la cadena que habrían dejado claro que no quieren verlo ni en pintura, mientras Navarro quiere volver al candelero por su trabajo, y no por su polémica vida privada.
Se dice, por ejemplo, que el propio Jorge Javier estaría entre sus valedores, y que opina que podría ser una buena baza para Mediaset que Navarro regrese a esa franja horaria.
Al debate sobre Navarro se ha unido el de otros sonados regresos que no salieron como esperaba: sin ir más lejos, el de Sara Carbonero, que ha vivido un claro descenso de popularidad tras haber pasado un tiempo apartado de la pequeña pantalla.
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Por cierto, que al fin sabemos la verdad: Pepe Navarro confiesa a Bertín Osborne los sorprendentes motivos que acabaron con el Mississippi.