Se acerca el buen tiempo, Semana Santa, los meses de verano, las escapadas a la playa. Toca poner a punto el coche, pero, ¿podemos hablar sobre los copilotos? No todos podemos llevar en el asiento de al lado a Luis Moya, el más famoso de España, y a cambio tenemos que llevar a quien nos toque: un familiar, un amigo… o un completo desconocido si estamos usando un servicio como BlaBlaCar.
Se acerca el buen tiempo, Semana Santa, los meses de verano, las escapadas a la playa. Toca poner a punto el coche, pero, ¿podemos hablar sobre los copilotos? No todos podemos llevar en el asiento de al lado a Luis Moya, el más famoso de España, y a cambio tenemos que llevar a quien nos toque: un familiar, un amigo… o un completo desconocido si estamos usando un servicio como BlaBlaCar.
Lo complicado es que tanto una pareja que nos deja de hablar como un cuñado que se pasa de listillo nos pueden amargar de tal manera que el viaje puede acabar siendo un desastre. Nos puede tocar uno de esos que indica constantemente la dirección que hay que tomar, con mensajes apocalípticos como “por ahí tardaremos más“, “ponte mejor en el carril central” y el peor de todos: “te lo dije“. Pero tampoco queremos un copiloto estilo “hombre invisible“, que no habla, no opina, e incluso llega a dormirse.
Todos deberíamos aprender a ser un buen copiloto, y nos hemos encontrado con varias propuestas al respecto, a cada cual más hilarante. Primero, la de José Mota, en este sketch del año pasado pero que sigue completamente vigente:
Y luego está esta tira de Moderna de Pueblo con su propuesta de carnet de copiloto:
¿Qué os parece a vosotros? Contádnoslo en los comentarios.
Por cierto, os dejamos con la historia más increíble jamás sucedida dentro de un BlaBlaCar la protagoniza esta señora hippie.